Al vivir en casa con tus mascotas, tienes que tener algunas precauciones para ponerlas a salvo de cualquier eventual accidente. Dependiendo de lo que tengas en tu hogar o de lo que te falte, puede ser necesario que hagas algunas modificaciones a tu vivienda. La verdad es que, por más que quieras a tus mascotas, no te agradará que ellas dañen tus muebles, paredes o ropa. Así, la mejor manera de proteger tus objetos, y también a tus animales, es certificarte de que todos los espacios de tu hogar cumplen con todos los requesitos necesarios para este efecto. ¿Cuáles son dichos requisitos? Abajo te los mencionamos para que tú y tus mascotas vivan en paz y con alegría.
Sala
Utiliza muebles que sean resistentes a mordeduras o rasguños, por ejemplo, aquellos elaborados con microfibra. Superficies brillantes de vidrio a menudo dejan huellas de patas y son muy susceptibles a ser arañadas, por lo que siempre es mejor evitarlos o cubrirlos con un mantel u otro tipo de material.
En tu día a día, puedes cubrir tus sofás con cobertores o mantas antiguos para que, posteriormente, puedas cambiarlas y quitar el pelo animal acumulado en ellos. En momentos más formales, como visitas de familiares o amigos, puedes poner cobertores de calidad.
Si en tu vivienda tienes una chimenea, para que las llamas y cenizas no lastimen a tus animales, tienes que instalar un protector para que estos elementos no se proyecten fuera de la chimenea.
Recámaras
Medicación, lociones, perfumes y cosméticos pueden ser venenosos y herir a las mascotas, por lo cual hay que siempre mantener estas cosas guardadas en un lugar idóneo y nunca dejarlas al aire libre ni en lugares bajos.
Lo mismo se puede decir de cables o electrodomésticos peligrosos. Hay que guardarlos una vez utilizados.
Para salvaguardar la ropa y el calzado, lo mejor es mantener las puetas de los clósets cerradas.
Si permites a tu mascota subir a tu cama, entonces es conveniente utilizar colchas de colores oscuros para disfrazar los pelos que se junten allí.
Baño
Acomodar el jabón, shampú, acondicionadores y detergentes en alacenas u otras cavidades de los muebles de que dispongas.
Animales de reducido tamaño pueden ahogarse en tinas o retretes, por lo que es prudente mantener todas las cubiertas cerradas e invariablemente vaciar cualquier acumulación de agua que no se necesite.
Si secas tu ropa interior en tu baño, tienes que saber que los animales tienen una cierta tendencia a morder y jugar con estas piezas de tu vestimenta, por eso las tienes que colgar en lugares elevados.
Mantén, en todo momento, las puertas de lavadoras y secadoras siempre cerradas pues se sabe de gatos a los que les agrada dormir en el interior de estos artefactos.
Cocina
Prefiere comprar botes de basura que tus mascotas no puedan abrir, o ten la basura de tu hogar en un lugar únicamente accesible por humanos.
Infórmate sobre la comida que puede resultar nociva para la salud de tu animales. Por ejemplo, en el caso de los perros las uvas, pasas, nueces de macadamia, cebollas, ajos y el café pueden ser muy peligrosos.
Certifícate de que no tienes plantas tóxicas. Si el caso, cámbialas por otras que no lo sean.
Nunca dejes objetos cortantes como cuchillos o tenedores al alcance de tus mascotas.
Si estás cocinando y tienes un gato, intenta vigilarlo en lo poisble, ya que estos mamíferos, con su versatilidad y curiosidad pueden ocasionar algún accidente, como derramar agua que está hirviendo.